Antropoceno: Egocentrismo puro
Moda o realidad, creer o reventar, según los más prestigiosos investigadores estamos viviendo una nueva era: el periodo Antropoceno. En términos estrictamente científicos estaríamos transitando una nueva unidad de tiempo geológico, una nueva época.
Bombay, la ciudad más poblada de la India con 21 millones de habitantes. Foto: Tomás I. Marina.
Para los mundanos no geólogos como yo aclaremos que desde el origen del Planeta Tierra, allá hace aproximadamente 4600 millones de años, existieron muchos periodos geológicos. Estos no son más que divisiones de la historia de vida de la Tierra que el hombre crea y que pueden ser identificadas mediante cambios evidentes y rápidos (geológicamente hablando). Por ejemplo, el primer periodo de la era Paleozoica (540 millones de años atrás), y quizás el más famoso, fue el Cámbrico, distinguido por la aparición de organismos más “complejos” y multicelulares. La era Cenozoica y su límite inferior, es decir su comienzo, se estableció por la aparición de varias especies de invertebrados marinos y el gradual dominio de los mamíferos que conocemos actualmente gracias a la extinción de otras especies de vertebrados. Así podríamos citar más casos de importantes cambios por los que nuestro planeta ha transitado.
Veamos el caso que nos involucra de raíz: el Antropoceno.
La Tierra está sufriendo otro de esos evidentes y rápidos cambios en estos momentos. Los cambios incluyen: erosión y transporte de sedimento asociado a una gran variedad de procesos antropogénicos como colonización, agricultura y urbanización. Perturbaciones en la composición química de la atmósfera, océanos y suelos con significantes alteraciones en los ciclos de carbono, nitrógeno y fósforo. Las nuevas condiciones ambientales generadas por estos cambios incluyen el calentamiento global, la acidificación de los océanos, el incremento de regiones oceánicas de baja concentración de oxígeno (= zonas muertas). Todo lo anterior sumado a la pérdida de hábitats, la invasión de especies y los cambios físicos y químicos han generado una nueva biósfera.
- Labrando la tierra cerca de Nueva Delhi, India. Foto: Tomás I. Marina.
En este contexto de cambio, el término Antropoceno fue originalmente sugerido (Crutzen y Stoermer, 2000) para reflejar las perturbaciones de los procesos de la superficie de la Tierra por actividades humanas. El comienzo de esta nueva época es generalmente considerado a partir del 1800, aproximadamente al inicio de la revolución industrial en Europa. Sin embargo, existen sugerencias para establecer su comienzo más temprano o más tarde (al inicio de la era nuclear: 1940s).
Como todo concepto antropogénico, es decir que surge a través del hombre y que describe nuestro accionar, comenzó a ser ampliamente usado por…. el propio creador, obviamente! Pero como todavía tenemos un poco de humildad como especie animal conciliadora que somos, decidimos armar grupos de trabajo y convenciones para asentar formal y legalmente ideas propias.
Es por eso que hace unos pocos años se formó el Grupo de Trabajo del Antropoceno (Anhropocene Working Group) constituído por célebres investigadores, en su mayoría geólogos y paleontólogos europeos.
Para que el concepto Antropoceno sea aceptado de manera formal se necesita que sea: 1) científicamente justificable y, 2) útil como término formal para la comunidad científica. La justificación científica depende de qué tan bien los investigadores argumenten que la señal geológica que Homo sapiens está dejando en los suelos de la Tierra es lo suficientemente grande, clara y distintiva. Con respecto al segundo punto, la utilización que se ha estado haciendo del término desde su creación (2000) ha demostrado su utilidad de manera informal. Ahora se está evaluando si el hecho de formalizarlo, es decir escribirlo y agregarlo a la carta cronoestratigráfica internacional (ICC por sus siglas en inglés), hará más últil o ampliará su utilidad para las comunidades científicas como la geológica.
La fecha estimativa para la definición del “plebiscito” es 2016. Lamentablemente la decisión solo dependerá de una minoría de individuos que decidirán por toda la especie Homo sapiens.
No nos basta con alterar el bienestar de 8,74 millones de especies que co-habitan el Planeta Tierra con nosotros. Ahora estoy empezando a pensar seriamente si esto del calentamiento global y demás cambios antropogénicos no habrá sido sin querer queriendo. Todo para quedar en la historia de este planeta y mostrarle a la próxima especie dominadora quién es el que mandaba.
Con esto en mente me surgen algunas dudas existenciales:
¿Quién le dará fin a esta época? ¿Nosotros mismos o los venideros seres vivos dominadores del (empobrecido) Planeta Tierra? ¿Serán la nueva especie dominadora tan egocéntrica como Homo sapiens?
